Los educadores, determinados a eliminar la discriminación y la violencia contra las mujeres y las niñas

Mujeres de todo el mundo siguen enfrentándose a una discriminación y una desigualdad sistémicas que restringen sus posibilidades de elección, limitan su capacidad de actuación e impiden que contribuyan con su gran potencial a lograr la paz y el desarrollo.

Una delegación de ocho mujeres activistas de todos los rincones del planeta representará a la IE en la 51ª sesión de la Comisión sobre la situación de las mujeres de las Naciones Unidas, que se celebrará en Nueva York del 26 de febrero al 9 de marzo de 2007. La delegación hará un llamamiento a los Estados miembros de la ONU a fin de que refuercen su compromiso político y su responsabilidad de eliminar todas las formas de discriminación y violencia contra las mujeres y las niñas.

“La violencia contra las mujeres es tanto una de las causas como una de las consecuencias de la discriminación contra las mujeres”, afirmó Janice Eastman, Secretaria General Adjunta de la IE, que dirigirá la delegación de la IE ante la Comisión de la situación de la mujer.

“Los esfuerzos por prevenir y acabar de una vez por todas con la violencia contra las mujeres deben verse fundados en el esfuerzo de todos los Estados miembros por eliminar la discriminación contra las mujeres y fomentar sus derechos y sus libertades fundamentales”, continuó Eastman. “Y esto no sólo implica garantizar que las leyes y las políticas no sean discriminatorias, sino también que a través de la educación se cambien las concepciones estereotipadas sobre el papel que desempeña cada uno de los dos géneros”.

“Los sindicatos de docentes de todo el mundo están totalmente preparados para cumplir con su parte”, añadió Eastman.

La educación es fundamental porque representa en sí misma un proceso de hacia la autonomía. Por eso, la IE y sus organizaciones miembro instan a los gobiernos a lograr los objetivos de la Educación para Todos y los Objetivos de Desarrollo del Milenio relacionados con la educación de la forma siguiente:

1. Garantizando el derecho fundamental a la educación de las niñas de todo el mundo;

2. Consolidando las oportunidades que tienen las niñas de continuar con la educación secundaria al mismo tiempo que se cumplen los compromisos sobre la educación primaria universal;

3. Consiguiendo unas escuelas que acojan positivamente a las niñas;

4. Contratando a mujeres docentes en las comunidades donde el índice de matriculación de las niñas es bajo debido a factores culturales y prácticas tradicionales que plantean obstáculos a la educación;

5. Poniendo en práctica convenciones internacionales que prohíban el trabajo infantil e impongan una edad mínima para comenzar a trabajar;

6. Combatiendo la violencia contra las mujeres y las niñas;

7. Tomando medidas para prevenir, eliminar y castigar el tráfico de personas, especialmente el de mujeres y niños, y ayudar a sus víctimas; y

8. Proporcionando educación sobre salud sexual y acceso a unos servicios públicos de calidad para los adolescentes, las mujeres pobres y los grupos desfavorecidos.

“Si los gobiernos de todo el mundo pusieran en práctica estas medidas, tendrían un gran impacto positivo en las vidas de las mujeres y las niñas de todo el mundo” dijo Eastman. “En la Internacional de la Educación y en nuestras organizaciones miembro de todo el mundo estamos totalmente comprometidos a alcanzar el objetivo de una educación de calidad para todos, y especialmente para las mujeres y las niñas, porque su educación es la clave del desarrollo”.