Apuntes para el desarrollo de la labor educativa del profesor del nivel superior.

Titulo: Apuntes para el desarrollo de la labor educativa del profesor del nivel superior.
Autoras: MSc. Dra en Medicina Yisel Alonso Vila. Dra en Medicina Iralvis Palomino Furquet. MSc. María Rosa Núñez González.
Pensamiento
Instruir no es lo mismo que educación, no hay buena educación sin instrucción, aquella se refiere al pensamiento y esta a los sentimientos no hay buena educación sin instrucción sin embargo las cualidades morales suben de precio cuando están realizadas por las cualidades inteligentes.
José Martí
Resumen
La educación supone interacción entre las personas que intervienen enseñando y aprendiendo simultáneamente, es la esencia de un problema social y personal, la dinámica educativa, incluye a todos, es una actividad permanente que integra a los hijos, maestros, padres y comunidad en su conjunto, es una preocupación de todos. Tanto el profesor como el alumno, son agentes efectivos del proceso de enseñanza-aprendizaje. Paralelamente a las funciones docentes, los profesores suelen realizar funciones de investigación (especialmente en el ámbito universitario), de formación permanente (formación del profesorado) y tareas organizativas o directivas en los centros docentes. La enseñanza tutoral, es un tipo de enseñanza que implica el contacto continuo y directo profesor-alumno, un intercambio permanente entre ambos. El proceso docente educativo como parte del proceso educativo posee tres dimensiones y funciones instructiva, desarrolladora, y educativa, el aprendizaje es la actividad que desarrolla el estudiante en su formación. El proceso formativo esta integrado por tres procesos, el instructivito que se lleva a acabo mediante la labor de la enseñanza, el desarrollador que se realiza conjuntamente con el instructivo y el educativo que se lleva a cabo mediante la labor educativa.
Palabras claves
Educación, dinámica educativa, labor educativa, enseñanza tutoral, proceso docente educativo e instructivo, profesor del nivel superior.

Introducción
Las puertas del nuevo milenio se han abierto, la palabra de orden es cambio en aspectos económicos, culturales, sociales y científicos tecnológicos, algunas de estas trasformaciones significan desarrollo, otros francamente constituyen involución.
Educación proviene de la raíz latina ducere que significa conducir, acción intencional de preparar a los sujetos para la viada en sociedad. Sin embargo, el sistema escolar formal planificado e institucional, no agota la experiencia vital de los niños y adolescentes que interviene en un entramado de situaciones, de ámbitos donde aprenden y forman su personalidad.
Educar es aprender a vivir en sociedad. La educación supone interacción entre las personas que intervienen enseñando y aprendiendo simultáneamente, en un ínter juego de relaciones personales que le confiere una dinámica particular a este proceso. La educación es la esencia de un problema social y personal, la dinámica educativa, nos incluye a todos, es una actividad permanente que integra a los hijos, maestros, padres y comunidad en su conjunto, es una preocupación de todos.
El ministerio de educación define los fines y objetivos de educación en el país, dictan las políticas correspondientes en consecuencias con el proyecto social. (1)
Enseñar a los alumnos exige a los maestros coherencia entre los valores que promulga y su conducta personal, así como correspondencia con los principios que integran la filosofía y el proyecto educativo de la escuela con los discursos y comportamientos del colectivo pedagógico. (2)
La existencia de varios maestros en la preparación de los alumnos pudiera no formular valores como la responsabilidad, la organización, el respeto, colectividad, solidaridad entre otros, imprescindibles para convivir, sino se observa acuerdo, unidad, coherencia de opinión y acción entre los maestros.
Las experiencias de maestros en su quehacer cotidiano y los resultados de investigaciones de especialistas de la vida docente demuestran que temas como el conocimiento de la dinámica del grupo escolar, la influencia de las expectativas de los profesores en el comportamiento de los alumnos, los valores y sus incidencias en el proceso educativo, los conflictos escolares y tantos problemas requieren de una visión psicosocial de la educación.
El trabajo en grupo representa una experiencia social en la medida en que los participantes interactúan entre si en torno a la tarea. En el mismo se modifica el rol del educando, de un rol pasivo a un rol protagónico en el aprendizaje. Se crea un espacio para la vivencia, la reflexión y la conceptualización, se llevan a cabo diferentes aprendizajes es el proceso que realiza el sujeto para indagar e investigar la realidad y modificarla el mismo.
Tanto el profesor como el alumno, son agentes efectivos del proceso de enseñanza-aprendizaje. Paralelamente a las funciones docentes, los profesores suelen realizar funciones de investigación (especialmente en el ámbito universitario), de formación permanente (formación del profesorado) y tareas organizativas o directivas en los centros docentes. Una de esas funciones es la denominada función tutoral, que en el caso de la enseñanza primaria y secundaria se centra en los alumnos y sus familias (cuando es realizada por profesores especializados en este ámbito se denomina orientación educativa) y en el caso de la enseñanza superior consiste en la dirección de las actividades de investigación a cargo de los estudiantes, como las tesis doctorales. (3)
La enseñanza tutoral, es un tipo de enseñanza que implica el contacto continuo y directo profesor-alumno, un intercambio permanente entre ambos.
En esta relación la autonomía e independencia del estudiante es mucho mayor y necesita la flexibilidad de los programas docentes.
La tutoría, entendida como elemento individualizador a la vez que integrador de la educación, es un componente esencial de la función docente. Frente a las tendencias tradicionales de negación de la diversidad del alumnado, la función tutoral tiene por objetivo asegurar que la educación sea verdaderamente integral y personalizada y no quede reducida a un simple trasvase de conocimientos. Por lo tanto, la acción tutoral debe dar relevancia a aquellas características de la educación que trascienden la instrucción y conforman ese fondo de experiencias que permiten una educación individualizada e integral. Así, la función tutoral se identifica con la función docente, todo profesor debe realizar tareas que van más allá de la impartición de conocimientos. En este sentido, solo procede hablar de la función tutoral de manera específica, entendida esta como un elemento inseparable del proceso educativo en su conjunto.
La tutoría juega un papel importante puesto que se constituye como un espacio educativo que permite el seguimiento en el proceso de formación de los estudiantes, así como en el planteamiento y desarrollo de estrategias dirigidas a estimular habilidades y destrezas. (4)
El tutor tiene una privilegiada oportunidad de aportar a la formación desu tutorado una actitud abierta y sin perjuicios, una disposición a la ayuda y a la colaboración, la posibilidad de escuchar y respetar en la relación con su tutorado son ejemplos y posibilidad de aprendizaje en cada momento en que se interactúa, este toma elementos de esa interacción que, difícilmente se aprenderán en clases durante una excelente exposición del maestro.
La tutoría es una oportunidad constante de aportar actitudes y valores a la formación del tutorado, aspectos que no podrían aprenderse de otra forma más que a través de las vivencias de la interacción entre tutor-tutorado. (5)
La escuela como institución se caracteriza por un a estructura de roles, normas y valores propios. La estructura de valores conformada por los alumnos, maestros, dirigentes institucionales, personal administrativo y de servicio, supone una división de trabajo dirigida a cumplir la misión de la escuela, que es la de educar a los alumnos lo cual le imprime un sello distintivo a la institución.
La responsabilidad de educar que adquieren los maestros no lleva implícito en el reempeño del rol; que se logre siempre el éxito ya que asumimos ese papel con una preparación en ocasiones incumplidas porque nos especializamos en una rama de la ciencia pero poco o nada sabemos de cómo relacionarnos con el otro y como comunicarnos en la solución de la vida escolar. (6)
Muchas son las teorías que implica ser educador desde la enseñanza de los rudimentos de la ciencia que forma a los obreros, profesionales y científicos del futuro hasta que aprendan a pensar, reflexionar, elabora juicios y valoraciones sobre si mismo y los demás. Esta en manos de los maestros la semillas que bien cultivadas, regadas y atendidas con amor y dedicación, cosechan los hombres del mañana y en esta hermosa y noble tarea los maestros juntos a la familia y la comunidad, asumen le reto de elevar la calidad de la formación de las nuevas generaciones. (7)
Objetivo: Realizar un análisis critico reflexivo de los aspectos fundamentales de la labor educativa del profesor y sus funciones en el proceso docente educativo de la educación superior.
Desarrollo
Profesor, docente o enseñante es quien se dedica profesionalmente a la enseñanza, bien con carácter general, bien especializado en una determinada área de conocimiento, asignatura, disciplina académica, ciencia o arte. Además de la transmisión de valores, técnicas y conocimientos generales o específicos de la materia que enseña, parte de la función pedagógica del profesor consiste en facilitar el aprendizaje para que el alumno (estudiante o discente) lo alcance de la mejor manera posible.
El tutor orienta, asesora y acompaña al alumno durante su proceso de enseñanza-aprendizaje, desde la perspectiva de conducirlo hacia su formación integral, lo que significa estimular en él la capacidad de hacerse responsable de su aprendizaje y de su formación. (8)
El tutor deberá mantener una actitud ética y empática hacia los estudiantes mediante un esfuerzo permanente de comunicación que les permita desarrollar las actitudes adecuadas para inspirar confianza y lograr la aceptación de los educandos, manteniendo siempre un diálogo en sentido positivo y la mayor tolerancia hacia sus reacciones. Lo anterior se apoya en la actuación siempre responsable del tutor, quien deberá atender sus compromisos con toda puntualidad y en un marco de respeto y confidencialidad.
Contará con habilidades y actitudes, que conservará durante todo el proceso tutoral, como la de ser creativo, para aumentar el interés del tutorado, crítico, observador y conciliador. Su desempeño se basará en un esfuerzo planificado y ordenado tanto en su área profesional como en el proceso de la tutoría.
Es determinante para mantener una adecuada relación con el estudiante, que el tutor esté dotado de habilidades para efectuar las entrevistas tanto de nivel personal como grupal. Asimismo deberá estar entrenado para escuchar a los estudiantes y extraer la información que le sea útil para las acciones de tutoría que emprenda. Ello implica que el tutor mantenga un equilibrio entre la relación afectiva y cognoscitiva que le permita delimitar adecuadamente el proceso de tutoría. (9)
Papel del educador.
Un buen maestro es quien sea ejemplo de paciencia sin limites , receptor de todo tipo de demandas , formador de los hombres del mañana resolver los conflictos familiares de los alumnos, artista en el arte de educar, consejero, amistoso un poco psicólogo que mantenga una dinámica grupal sin concesiones ni conflictos, que contribuya la formación integral de la personalidad de los alumnos, cumplidor de los planes y programas de estudio, responder a las demandas de los padre de cada niño, de la institución, de la auto imagen interiorizada como modelo, esto es como una sonrisa a flor de piel, sin dar muestra de desgastes con la institución, con la intención de alcanzar un producto ideal que lo ha incorporado a su proyecto personal de maestro. (10)
Rol del profesor
En las recomendaciones del Comité de Maestros de Educación de América latina relativa a la ejecución del proyecto principal de educación se considera que la profesionalización de las actividades educativas es el concepto central y debe caracterizar las actividades de esta nueva etapa de desarrollo educativa, se considera que el rol del maestro le son propios la creatividad y la innovación, pero estas características no derivan en el desempeño del quehacer profesional del maestro por arte magia, ya que al incorporarlo en el ámbito escolar el resultado es todo lo opuesto, la actividad se hace monótona y esteriotipada y se limita el despliegue de sus potencialidades. (11)
La orientación debe formar parte integrante del proceso de aprendizaje, los niños crecen y se desarrollan continuamente y donde ocurren los procesos de formación y desarrollo; es indispensable que la orientación dirija esta formación de los alumnos en la comunicación profesor alumno, la formación informativa adquiere una gran significación ya que es él, el encargado de facilitar la construcción de los conocimientos, las habilidades y transmitir las experiencias necesarias en la formación de los estudiantes, debe ser considerada como el servicio destinado a ayudar a los alumnos a escoger sabiamente varias alternativas ayudándolos a adaptarse a la sociedad donde viven.
El educador no solo ha de interesarse porque el mensaje sea adecuadamente recibido por los alumnos empleando para ellos un lenguaje claro un tono que despierte el interés y asegure la comprensión del material que se estudia y recibir la información de retorno para conocer las opiniones y criterios de los estudiantes y el efecto de su actualización sobre ellos, para de esa forma dirigir la actividad sino que también el momento emocional que deviene de esta interrelación, es de extraordinario valor en el seguimiento y desarrollo de los intereses del estudio y la profesión. (12)
Las funciones del profesor tutor en el contexto del modelo actual de la formación de médicos en Cuba, se desglosan en tres grupos principales:
1. Funciones motivadoras.
2. Funciones educativas.
3. Funciones docentes-investigativas.
El tutor se identifica con determinadas características, entre las que se encuentran una personalidad equilibrada, facilidades para la comunicación, dominio de una ciencia o especialidad afín con el programa de formación en su aplicación práctica, preparación teórica, experiencia docente y de investigación, adecuada preparación metodológica para facilitar el aprendizaje del estudiante, motivación por trabajar en condiciones diferentes a la transmisión de conocimientos y como facilitador, dinámico para facilitar, motivar e interesar por el objeto de formación, promueve la responsabilidad.
Es importante conocer las mayores necesidades de su tutorado y lograr que este descubra su satisfacción durante el proceso de formación, despertando el interés por la profesión, promoviendo la iniciativa, la creatividad y la actividad intelectual, fortalecer el desarrollo de las motivaciones profesionales, despertando motivaciones morales para formar valores y desarrollando el sentido de pertenencia y el amor hacia la profesión e integrar las funciones educativas y docentes-metodológicas en aras de despertar los intereses motivacionales de los tutorados por la formación pedagógica. (13)
Apuntes de los aspectos fundamentales de la labor educativa.
La convicción es el firme reconocimiento del valor objetivo de la idea, las actividades son la disposición para actuar en cierta forma.
Los sentimientos constituyen una forma especial de reflejar la realidad entre las personas desempeñando un papel inmerso en la conducta del individuo tanto en la actividad práctica como cognoscitiva.
Las cualidades valiosas de la personalidad del sujeto son cualidades morales positivas en nuestra sociedad; la honradez, la modestia, la laboriosidad y la fidelidad al deber social, el colectivismo el humanismo, el patriotismo y el internacionalismo. La labor educativa que se desarrolla en la escuela se le llama educación en sentido estrecho, a la escuela se le asigna la misión fundamental de la educación de las nuevas generaciones. (14)
El proceso docente educativo como parte del proceso educativo posee tres dimensiones y funciones instructiva, desarrolladora, y educativa, el aprendizaje es la actividad que desarrolla el estudiante en su formación.
El objetivo educativo es la aspiración más trascendente, es lo que se aspira a formar en cuanto a comunicaciones, actitudes, valores, sentimientos, caracteres y cualidades valiosas de la personalidad, esto se alcanza junto al objetivo instructivo y desarrollador, es un resultado que se alcanza a largo plazo.
Entre los aspectos centrales de la labor educativa se encuentra la convicción que es la transformación de una idea objetivamente significativa en subjetivamente significativa, para que se forme una convicción deben conjugarse los aspectos intelectuales, emotivos y volutivos, por lo que es necesario a su vez la formación de sentimientos y actitudes.
La actitud es la forma de actuar de una persona, el comportamiento que emplea un individuo para hacer las cosas; es la tendencia del individuo a reaccionar, ya sea positiva o negativamente, a cierto valor social; es nuestra respuesta emocional y mental a las circunstancias de la vida.
El profesor como sujeto activo del proceso docente educativo, lo guía y establece las relaciones de influencia sobre el estudiante a través de
la comunicación oral y corporal y por medio del ejemplo personal para lograr la transformación del estudiante. (15)
La motivación es la forma con que la personalidad del estudiante se concreta su necesidad, se establece las relaciones mediante la comunicación. Sin motivación hay instrucción deficiente, sin motivación no hay educación.
El proceso formativo esta integrado por tres procesos, el instructivito que se lleva a acabo mediante la labor de la enseñanza, el desarrollador que se realiza conjuntamente con el instructivo y el educativo que se lleva a cabo mediante la labor educativa.
La enseñanza debe a su vez lograr que se formen motivos e intereses para el estudio ya que es una habilidad a lograr para la educación permanente.
Los valores son la medida de la significación que poseen los conocimientos y las habilidades para los estudiantes, que orientan su actividad en la práctica. (16)
El proceso docente educativo que el profesor dirige y controla organizadamente, vinculado con su evaluación, permitirá comprobar el grado que se ha alcanzado con los objetivos; por tanto el aprendizaje que ha logrado el estudiantes , así como los cambios y modificaciones de la actuación general producida en le estudiante.
Es importante evaluar conjuntamente con los conocimientos hábitos y habilidades; el desarrollo de los valores que se ha logrado en el alumno, la evaluación es una en la medida que refleja la unidad entre la instrucción y la educación, en le proceso pedagógico, es un proceso único al que le corresponde una evaluación única integradora. Toda evaluación de trabajo pedagógico resulta falsa sino se evalúa su efecto educativo. (17)
En el mundo que se desarrolla vertiginosamente y donde la labor de educar pareciera que pierde espacio cuando lo que exige es que se revitalice con una visión mas amplia de la educación.
Los paradigmas educativos están concebidos al propio desarrollo científico técnico vertiginoso en el mundo en que vivimos, demanda la formación de determinadas habilidades en los futuros hombres y mujeres para insertarse laboralmente, ello obliga a que los maestros de manera adecuada se coloquen a tono con la exigencia social y se prepare para poder desempeñar adecuadamente su rol. (18)
Conclusiones
La labor del profesorado no se centra solo en transmitir conocimientos, sino también en trabajar valores y actitudes, y teniendo presente a un alumnado con capacidades, necesidades e intereses concretos, por lo que se apuesta por un modelo implícito de profesor-educador.
Todo profesional de la Educación Superior en su labor educativa debe tener presente los valores como honestidad, lealtad, identidad cultural, respeto, equidad, solidaridad, tolerancia; fundamentales para el convivir pacífico de la sociedad.
Referencias bibliográficas
1. Brunner, J, Educación: escenarios de futuro. Nuevas tecnologías y sociedad de la información, PREAL, No.16, Chile, 2000.
2. Chávez, J, Bosquejo histórico de las ideas educativas en Cuba, Editorial Pueblo y Educación, Cuba, 2006.
3. Psicología Social” (2007) de R. Baron y D. Byrne – Editorial Prentice Hall ISBN 0-205-18944-X
4. Zabalza, M, A, La enseñanza universitaria. El escenario y sus protagonistas, Narcea, S.A de Ediciones, España, 2002.
5. Castellanos, D y otros, Aprender y enseñar en la escuela, Editorial Pueblo y Educación, La Habana, 2002.
6. Castellanos, D y otros, Hacia una concepción del aprendizaje desarrollador, ISPEJV, Colección Proyectos, La Habana, Cuba, 2001.
7. Fernández, A, El formador de Formación Profesional y Ocupacional, Ediciones Octaedro. Barcelona, 2000.
8. Alanis, A, Estrategias docentes y estrategias de aprendizaje, en
Revista digital de Educación y nuevas tecnologías, en
http://www.contexto-educativo.com.ar/archivo.htm, (16/1/2002)
9. Zilberstein, J, Alcanzar la cima desde abajo. Una alternativa para elevar la calidad del proceso de enseñanza aprendizaje desde la propia institución docente, Educación, No. 104, septiembre a diciembre, Cuba, 2001.
10. Tünnermann C, Desafíos del docente universitario ante el siglo XXI,
Conciencia y Educación Superior, Vol.3, enero, Órgano Oficial del Consejo
Nacional de Educación Superior. Republica Dominicana, 2001.
11. La Universalización de las Universidades: Retos y perspectivas.
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12. UNESCO, Proyecto Regional de Educación para América Latina y el
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14. UNESCO, Declaración Mundial sobre la Educación Superior en el siglo
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15. Silvestre, M, Aprendizaje, Educación y Desarrollo, Editorial Pueblo y
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http://www.education.unesco.org:80/educprog/ (22-12-00)
16. Zilberstein, J y R, Portela, Una Concepción Desarrolladora de la
Motivación y el Aprendizaje de las Ciencias, Editorial Pueblo y Educación,
Cuba, 2002.
17. Zilberstein, J y otros, Una alternativa para elevar la calidad y la eficiencia de la educación desde la propia institución docente, en Calidad Educativa en un mundo globalizado: intercambio de experiencias y perspectivas, Servicios de Publicaciones U:A:H, Universidad de Alcalá, España, 2001
18. Eiser, J.R. Psicología Social. Madrid: valencia. Tomo I – Plaza &
Janes Editores SA ISBN 84-01-61264-0, 2009.