Aproximación al rol del promotor cultural en comunidades rurales del municipio de Abreus.

 

 Autora principal:  MSc. María Rosa Nuñez González

Introducción

 La educación artística desde la primera infancia hasta otras generaciones ha sido una aspiración plasmada en  planes y programas de la política social en Cuba, en la que organizaciones y sectores dedicados a los procesos de instruir y educar en esa dirección,  establecen normas a fin de contribuir a una personalidad dotada de una cultura general integral;  esta  pretensión se confirma aún más en el nuevo milenio.

A partir de 1959 el gobierno revolucionario convierte la extensión de la cultura a todo el pueblo en una de las primeras tareas de la recién triunfada revolución, al respecto Fidel expresó: “…debemos librar una guerra de todo el pueblo contra la incultura”.

La escuela cubana tiene como fin supremo la formación integral y humanista de los escolares; para ello se inician importantes programas con el objetivo de propiciar el acceso de la población a la cultura artística.

 Entender la cultura en su sentido amplio significa tener conciencia de la importancia educativa, político-ideológica y cultural del arte. Por todo esto el Ministerio de Educación desde hace más de 30 años dispuso que la Educación Artística es una de las líneas esenciales de los programas de estudio.

Convertir a nuestras escuelas en lugares llenos de atractivos, belleza e interés y asumir las nuevas exigencias de estos tiempos es el reto al que estan llamados los educadores cubanos, desde sus desempeños, ya sea como docentes directos, educadores populares o profesores de determinadas especialidades.

Con la reactivación del convenio MINED – MINCULT, en el transcurso de la aplicación del Programa de Educación Estética y otros creados en los últimos años, con la batalla de ideas, se han realizado múltiples investigaciones, mediante la aplicación de diferentes instrumentos elaborados al respecto que han permitido comprobar los resultados de su ejecución y realizar los ajustes pertinentes para su mejoramiento continuo.

En ese sentido, al finalizar cada curso escolar se analizan los resultados obtenidos y se determinan las prioridades a atender, en correspondencia, con el próximo año escolar.

En el presente trabajo se aborda  el quehacer diario con los resultados obtenidos hasta la actualidad en este campo; los que no constituyen un capítulo cerrado, es necesario un seguimiento permanente que facilite la constatación del impacto en la sociedad y proyecte los cambios perspectivos, en aras de rediseñar os escenarios para sembrar una cultura en ese sentido.

En este trabajo el objetivo se dirige a: Constatar a partir del análisis teórico, crítico  y reflexivo de las perspectivas de la Educación Artística en Cuba, los resultados de la Brigada José Martí, como un ejército de la cultura, en el municipio Abreus. 

Desarrollo

Un repaso a los antecedentes de la Educación Artística en Cuba, antes de 1959

 El desarrollo de la educación artística en Cuba ha estado muy ligado a la evolución de la intelectualidad cubana desde el siglo XVIII, ya desde esa época aparecieron muestras de la preocupación y necesidad de la formación artística, por ejemplo, el primer compositor cubano del que se tienen noticias, Esteban Salas, formaba músicos para la orquesta de la Catedral de Santiago de Cuba, donde se interpretaron obras del clasicismo europeo por primera vez en el país.

En el siglo XIX se gesta la nacionalidad cubana y puede considerarse el punto de partida de la enseñanza de las artes en Cuba, especialmente de la música y las artes plásticas.

Así lo demuestran determinados hechos significativos como la fundación del Conservatorio de Música de La Habana, en 1885, por el pianista holandés Hubert de Black, y la Academia de Artes Plástica de San Alejandro, de las cuales surgieron gran parte de los artistas profesionales que se desenvolvieron en casi todo el siglo XX.

Como reflejo de la conciencia general que se venía gestando desde el siglo XIX en el ámbito intelectual Cubano y cultural de las décadas de 1930 y 1940, un grupo de escritores y artistas se reúnen para analizar las distintas manifestaciones del Arte cubano, así como su enseñanza, tanto en la esfera especializada como educacional, en el Primer Congreso Nacional de Arte Cubano, que se celebró en Santiago de Cuba, del bajo los auspicios del Secretario de Educación.

Desde el advenimiento de la República se incluyen en los planes de la escuela general programas de Música y Dibujo, que se mantuvieron en los diferentes cambios de planes de estudio durante los primeros cincuenta años de este siglo. En este sentido cabe destacar las décadas del cuarenta y el cincuenta con un florecimiento de la Educación Musical para la escuela general y la formación de los maestros especialistas, bajo la orientación de destacados músicos pedagogos, como Joaquín Rodríguez Lanza, César Pérez Sentenat, Argeliers León, entre otros.

En las escuelas Normales de Maestros y en las de Kindergarten se incluía la enseña de la música con distintas asignaturas, y de las artes plásticas, y estos maestros tocaban el piano y la guitarra.

Todos esos esfuerzos realizados por intelectuales, artistas y pedagogos para desarrollar la enseñanza de las artes de forma estable, sistemática y coherente en las escuelas, y mediante otros medios a la población, se vio limitado por las propias condiciones de subdesarrollo en que estaba sumido el país y por el régimen social imperante, convirtiéndose en un privilegio de las clases pudientes y de determinados centros docentes muy seleccionados.

La desatención de los gobiernos no garantizaba los servicios educacionales en general, mucho menos los especializados en arte. Los planes de estudio oficiales no garantizaban la preparación estatal del pedagogo del arte.

Programas de la Revolución relacionados con la Cultura y Educación Artística

A partir del año 1959, las políticas culturales dan prioridad a la Educación Artística en Cuba; se incluye en los programas de estudio del MINED asignaturas para ese fin. Además se tiene presente en esa dirección la formación de docentes para llevar a cabo el desarrollo de eventos, festivales y otras actividades que suplen las carencias dejadas por el anterior sistema.

En la ultima década han surgido  Programas de la Revolución relacionados con la Cultura Artística; varios de ellos afines con la Formación de Promotores Culturales, Instructores de Arte, Formación Vocacional hacia las Artes entre otros.

En el mes de febrero de 2001 a partir de la experiencia en la formación de los Instructores de arte con los antecedentes del año 1961 y como parte de la batalla de ideas se decide por la dirección de la Revolución, la creación del programa para la formación de los Instructores de Arte.

Las Orientaciones, se precisan por parte de la UJC y se inicia el trabajo conjunto de los Ministerios de Educación y Cultura para poner en práctica las indicaciones del Comandante en Jefe; las que en esencia planteaban:

Creación 15 escuelas de Instructores de Arte de manera que se logre que en 10 años la presencia de aproximadamente 30000 instructores en las comunidades cubanas, priorizando el sector rural.

Se garantiza un ingreso anual de 4000 estudiantes por año al sistema de Escuelas de Instructores de Arte a fin del logro de esta tarea con la integración del Ministerio de Cultura y el Ministerio de Educación y estudiar las necesidades por territorio. Estos centros deben convertirse en modelos de disciplina, y consagración al estudio.

La existencia de un plan de estudio encaminado a la formación profesional sobre la base de un Bachiller en Humanidades.

 Lograr una cultura general integral en la formación de los estudiantes, además de la profesión.

El dominio por los estudiantes de las otras especialidades, además de las habilidades propias de su formación y para ellos se cuenta con el apoyo de los mejores profesores y la vanguardia intelectual vinculada a estos centros y se creó una comisión en cada provincia que asegure el profesorado con la mejor calidad posible.

En mayo queda aprobado el proyecto presentado y en agosto se efectúa la reunión del Comandante con los futuros directores de las Escuelas de Instructores de Arte. Tres meses después, en septiembre inician su funcionamiento las 15 escuelas, con una matrícula de 4057 estudiantes en ese primer curso optaron por esta carrera más de 12 000 estudiantes.

Un número considerable nunca había tocado algún instrumento musical, en el caso de Artes Plásticas la mayoría no había recibido clases especializadas de pintura o dibujo, ni de teatro y danza.

El plan de estudio surgió con 6 600 horas en la especialidad de Teatro, 6 800 horas en Artes Plásticas, 6 680 horas en Danza, 7 120 en Conjuntos Musicales y 6 720 en Coro. Actualmente el Plan de Música se fusionó en uno solo y cuenta con 6656 horas.

Como parte de los Planes de Estudio vigentes para las escuelas de Instructores de Arte se desarrollan las prácticas preprofesionales durante el 2do, 3er y 4to años, durante una semana, 15 días y 12 semanas respectivamente, a partir de este vínculo con las escuelas y casas de cultura, desarrollan varias actividades que lo preparan para su futura labor profesional, tales como, realización del diagnóstico sociocultural de las escuelas y la comunidad, conocen los hábitos y preferencias culturales de los estudiantes, se adiestran en el proceso selectivo de los estudiantes con aptitudes y talento artístico, asesoran el trabajo de las agrupaciones artísticas ya existentes y en el caso de los practicantes de cuarto año desarrollan talleres de apreciación y creación artística y se preparan para la realización de su examen final. El claustro esta formado por 3065 profesores entre los que se encuentran reconocidos artistas e intelectuales.

Después de 10 años de creado el programa y contando con más de 9 000 graduados que cubren en más de 4000 escuelas de las diferentes enseñanzas y atienden a un universo de 800 000 niños, niñas, adolescentes y jóvenes en talleres de apreciación y creación artística se demuestra que las Escuelas de formación de Instructores de Arte lograron sus principales objetivos; asumiendo sus aciertos y debilidades.

El Convenio de trabajo MINED – MINCULT

 En el año 1981 se establece y pone en práctica el convenio de trabajo entre el Ministerio de Educación y el Ministerio de Cultura reconociendo ambos organismos que: La educación artística y la formación estética como parte de los planes y programas de estudio y de la actividad regular del sistema docente, será la respuesta más profunda y científicamente elaborada para responder al reto de la masividad y calidad artística que reclama el socialismo”.

En 1998 se reactiva el convenio de trabajo existente entre el Ministerio de Educación y el Ministerio de Cultura teniendo en cuenta la importancia educativa e ideológica de la cultura, ratificada recientemente por nuestro Comandante en jefe, cuando nos exhortó a luchar para que el próximo siglo sea el de la "Manifestación de la Cultura" y conscientes de que para lograr este propósito se hece imprescindible continuar y perfeccionar el trabajo conjunto que contribuya al cumplimiento de los objetivos funcionales aprobados por el Partido Comunista de Cuba y el estado cubano para los Ministerios de Cultura y Ministerio de Educación, están plenamente identificados, toda vez que ambos tienen una marcada importancia educativa e ideológica.

Además la escuela es considerada la principal institución cultural de la comunidad a lo que debemos encaminar todos los esfuerzos en el terreno de la educación y la cultura para alcanzar el desarrollo más pleno de las jóvenes generaciones con una cultura general integral.

Instructores de Arte,  artistas en la profesión de enseñar arte al pueblo  

Los Instructores de Arte graduados integran la Brigada “José Martí”. Esta fuerza funciona como un movimiento juvenil y como un ejército de la cultura cuyo teatro de operaciones fundamental, aunque no el único es la escuela.

Con esta brigada, se consolida la identificación de estos jóvenes con sus responsabilidades como instructores de arte y se encauza el necesario vínculo que debe mantener con el movimiento artístico del país y de cada territorio en particular.

Se facilita una mejor atención en todos los sentidos. Los jóvenes que la integran son artistas de la hermosa profesión de enseñar arte al pueblo. Ellos han descubierto en el trabajo con los niños un campo de la pedagogía que los enriquece.

Con la llegada del instructor de Arte se ha consolidado la escuela como la Institución cultural más importante de la comunidad;  los resultados de su labor se reflejan en el seno de la familia y en la comunidad en general.

El trabajo de estos profesionales se proyecta más allá de la Institución cultural y ha dependido del vínculo con el resto de las instituciones culturales y sociales de la comunidad,  su presencia se ha enriquecido el sistema de trabajo con los niños, adolescentes y jóvenes.

 Las acciones que desarrollan los Instructores de Arte en los centros están encaminadas a alcanzar cinco propósitos fundamentales:

  1. El desarrollo de talleres de creación y apreciación con todos los alumnos del centro escolar.
  2. La atención a grupos y unidades artísticas de aficionados.
  3. La preparación técnico- metodológica del personal docente.
  4. La labor promocional de la cultura artística de la escuela.
  5. El mejoramiento del entorno de la escuela.

Estos jóvenes graduados de las Escuelas de formación de Instructores de Arte tienen el derecho a continuar sus estudios universitarios en cualquiera de las especialidades o carreras de humanidades que imparten los centros del Ministerio de Educación Superior y los Institutos Superiores Pedagógicos por el plan de la universalización de la enseñanza superior.

Teniendo en cuenta las peculiaridades del trabajo del Instructor de Arte, la necesidad de mantenerlos en una constante superación como profesionales identificados con su trabajo y el interés de una gran parte de ellos en continuar preparándose en una carrera a fin con su formación se decidió por parte de las autoridades educacionales abrir la carrera pedagógica Licenciatura en Educación, Especialidad Instructor de Arte, en estrecha coordinación entre los Ministerios de Educación, Cultura y Educación Superior.

La nueva carrera se imparte en los Institutos Superiores Pedagógicos en las condiciones de universalización de la Educación Superior, con una duración temporal de cuatro años. Se apoya sustancialmente en el Programa Audiovisual y en otros materiales audiovisuales y refuerza por igual la importancia del aprendizaje por esfuerzo propio y de la tutoría.

Esta carrera garantiza profundizar la formación humanista y pedagógica, perfeccionar las habilidades artísticas en la especialidad de la que se gradúan en la Escuela de Formación de Instructores de Arte.

La Brigada “José Martí”, un ejército de la cultura, en el municipio Abreus

El compañero Fidel Castro en el Discurso de clausura de la Primera Graduación de Instructores de Arte el 20 de octubre de 2004 en Santa Clara;  señaló a este ejército de jóvenes como la esperanza para el desarrollo de programas encaminados a la formación de una cultura general integral.

En el municipio de Abreus se graduaron  25 jóvenes en la especialidad; una de estas recién graduadas, la compañera Ines Danielli León Herrera,  recibió su titulo de Oro de manos del compañero Fidel, en esa ocasión, constituyendo un gran ejemplo de disciplina y altruismo para sus compañeros de graduación.

En sus inicios la Brigada José Martí, en el municipio Abreus estuvo coordinada por el Licenciado en Educación Reinaldo Acea Valera.

 Las acciones que desarrollan los Instructores de Arte en este territorio muestran como resultados fundamentales:

  • El desarrollo de talleres de creación y apreciación en las diferentes manifestaciones con la participación de los alumnos de cada  centro escolar en que desempeñan su labor.
  • La atención a grupos y unidades artísticas de aficionados, en coordinación con las Instituciones culturales, es un elemento en el que se destacan con proyectos culturales como Corazón, Afroyú, Torrentes de Sueño. Che Guevara, Rocío de cristal.
  • La preparación técnico- metodológica, materializada en la atención que se les brinda por los especialistas y la posibilidad de estudiar la Licenciatura en Educación, graduándose en esa carrera pedagógica, hasta la fecha 15 jóvenes.  
  • La labor promocional de la cultura artística de la escuela, matizada por el desarrollo de festivales y eventos que constatan su labor.
  • El mejoramiento del entorno de la escuela, a partir de acciones matizadas por la cultura del buen gusto en correspondencia con la educación y las características de cada territorio, muestra de ello es el centro escolar Héroes del Moncada y la escuela Camilo Cienfuegos.

Esta brigada tiene en sus filas a la compañera Adys María Puerto Moreno, que ha desarrollado un amplio trabajo comunitario con personas discapacitadas, apoyando a las asociaciones ANSOC, ANCI y ACLIFIM, sus resultados fueron acreedores de premios en festivales de corte provincial por el tratamiento dado a estos aficionados que salen del marco de la institución escolar.

Se destacan además en el desarrollo de investigaciones que aportan desde lo práctico resultados en:

·        Aplicación de talleres de Teatro de Calle.

·        Actividades para fomentar el cuidado del Medio Ambiente desde un círculo  de interés de Artes Plásticas en la Educación Especial”.

·        Estudio de gustos y preferencias por el reggaetón. Escuela Héroes del Moncada.

·        Actividades musicales dirigidas a revitalizar la canción infantil.

·        Talleres que integre la Educación Plástica con el Movimiento de Pioneros Exploradores.

·        Revitalización de las tradiciones locales

Bibliografía

González González, Gil Ramón y Fernández _ Larrea González, Mercedes. Educación y animación sociocultural. La intervención socioeducativa. Universidad de Pinar del Río. Cuba.

Suárez, Sady. “Relación escuela familia comunidad una necesidad de la educación cubana”. Tesis en opción al titulo académico de Master en Universidad de Oriente. Santiago de Cuba, 2008.

• Taller Regional de intercambio de experiencias proyectos novedosos participativos y sustentables. Resumen por Edición. Experiencias finalistas. Santiago de Cuba 25, 26 y 27 junio 2009.

• Técnicas participativas para la Educación Popular. Colectivo de autores. Editorial Alforja, España, 1987.

• Ulloa, Maritza. La formación de la cultura en las comunidades. Tesis en opción al titulo académico de Master en Desarrollo Cultural Comunitario. Universidad de Oriente. Facultad de Humanidades. Santiago de Cuba, 2002.

          


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